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Día 12
Milagros
Enero 17, 2025
Los primeros pasos para la liberación milagrosa son la oración guiada por el Espíritu y la fe en las obras de Jesús.
Escrituras de Hoy
“Me refiero a Jesús de Nazaret: cómo lo ungió Dios con el Espíritu Santo y con poder, y cómo anduvo haciendo el bien y sanando a todos los que estaban oprimidos por el diablo, porque Dios estaba con él”
—Hechos 10:38 (NVI)
“Además, Dios confirmó el mensaje mediante señales, maravillas, diversos milagros y dones del Espíritu Santo según su voluntad”
—Hebreos 2:4 (NTV)
Reflexione en la Palabra
Jesús siempre demostró Su bondad y cuidado por los innumerables quebrantados y lastimados. Ese mismo amor y compasión que fluía del corazón y las manos de Jesús, sigue cubriendo la tierra hoy. No importa cuál sea la necesidad, Jesús está dispuesto y esperando a ser involucrado. Él nunca está demasiado ocupado dirigiendo el universo como para no inundar de inmediato su vida con Su presencia y Su toque. Cualquiera que se acerque al cielo encontrará paz, poder y, a veces, un gozo inexplicable, incluso durante algunas de las más grandes pruebas de la vida.
Las personas han sido testigos de ojos ciegos, oídos sordos y todo lo demás siendo tocados milagrosamente por el poder del Espíritu Santo. Él es y siempre será el Dios que ama dar vida a Su pueblo. Sea lo que sea que esté enfrentando, confíe en que el mismo Jesús que cuidó a los hambrientos, los heridos, los atados, los enfermos y los desesperados será la respuesta y traerá calma a cada tormenta de la vida
Oración + Contemplación
01. Recuerde
Repase las Escrituras y recuerde cómo Jesús nunca dejó de mostrar Su amor y cuidado por cualquiera que tuviera una necesidad. Recuerde que “Jesucristo es el mismo ayer y hoy y por los siglos” (Hebreos 13:8, NBLA). Jesús es y siempre será Señor sobre cada situación o circunstancia en esta vida.
02. Ore
Ore que su propio nivel de fe aumente y crea que Jesús, de la misma forma que cuando caminó en esta tierra, obrará milagros en su vida y la vida de los que le rodean. Como primer paso, ore como lo hicieron los primeros creyentes cuando pidieron al Señor: “Auméntanos la fe” (Lucas 17:5, NBLA).
02. Traiga
Tome un momento hoy para traer ante el Señor necesidades que parecen irreparables. Pueden ser las suyas o las de un familiar o amigo que está sufriendo. Comience un camino de fe en que el mismo Jesús que caminó sobre las aguas embravecidas, puede encontrarse con usted donde y cuando se necesita un milagro.